¿Se acabó el impulso? Milei reconoció que en junio volverá el déficit fiscal y culpó a la oposición de las turbulencias del mercado

El clima parece enturbiarse para el Presidente de Argentina, Javier Milei. Después de dos meses con indicadores económicos al alza y celebraciones en el Ejecutivo por los avances y acuerdos alcanzados en torno a la Ley Bases, esta semana el mandatario ha enfrentado a una oposición más dura, datos financieros que comprometen su plan de ajuste, el primer gran cambio en su gabinete, el escándalo por los alimentos stockeados en los depósitos de Capital Humano y a una importante caída en la popularidad.

Según una Encuesta de CB Consultores, la imagen positiva del jefe de Estado cayó en 14 de las 24 provincias, en comparación con el mes de mayo.

El estudio reveló que la mayor imagen positiva de Milei se encuentra este mes en la provincia de Córdoba con 64,8%, mientras que la percepción más baja la obtiene en la provincia de Santiago del Estero con 41,5%.

Dónde más cayó en comparación con la medición anterior fue en la Provincia de Buenos Aires, dónde mantiene un enfrentamiento con su gobernador Axel Kicillof, con un retroceso de 3,5%.

La revelación de estos se da en momentos en que el mandatario se ha enfrentado con la oposición por la falta de apoyos en el Senado para avanzar con sus proyectos de ley, a quienes ha acusado de entorpecer la agenda. De hecho, este miércoles en el Latam Economic Forum en Buenos Aires, señaló que la situación que atraviesan los mercados y el dólar se debe a los "los ruidos de la política", y enfatizó en que gran parte del ajuste que ha realizado su administración es parte de la llamada "motosierra".

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Déficit fiscal

En medio de ese contexto, el jefe de Estado ya reconoció que en junio vuelve el déficit fiscal. "Mayo va a ser superavitario y junio, por el pago de los aguinaldos, va a ser deficitario, pero el déficit cero sigue en pie porque vamos a terminar con las cuenta superavitarias en el consolidado de los seis meses", explicó.

Dijo estar "tranquilo" por el curso de su programa económico y apuntó contra los "degenerados fiscales que quieren terminar con el déficit cero".

"Estamos muy tranquilos a pesar de lo que pasa en el mercado de cambios, donde algunos aprovechan para hacer predicciones apocalípticas. Pero esto se va a acomodar. A los pasivos remunerados los tenemos contra las cuerdas y eso es importante porque mientras suceda, al no tener déficit ni necesidad de emitir, cuando arreglemos los puts vamos a estar en condiciones de levantar el cepo. El riesgo país está en 1.500 pero créanme que lo vamos a derrotar también", apuntó.

Además, volvió a hacer foco en el Congreso, y acusó a senadores y diputados de querer "sabotear" su Gobierno.

"Fíjense lo que hacen los degenerados fiscales que están en el Congreso, lanzando leyes para sabotear la columna del programa económico del Gobierno. El martes dieron una prueba, son una casta inmunda porque se subieron 80% las dietas. Para pasar las reformas estructurales llevan tomándose seis meses, pero para aprobar el aumento para ellos lo hacen rapidito", indicó.

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Renuncia a jubilación

En tanto, el presidente oficializó este jueves su "renuncia indeclinable" a la jubilación de privilegio.

"Los acontecimientos ocurridos el día de ayer (miércoles( en el Honorable Congreso de la Nación ponen de manifiesto, una vez más, que nuestra clase política se encuentra más preocupada por mantener sus delirantes privilegios que por trabajar para revertir el modelo que ha fracasado el último siglo", manifestó el presidente en una misiva dirigida a Mariano de los Heros, titular de ANSES.